Tu encomienda llegó cuando menos lo esperaba y el solo tocar esa cajita ya me hizo pensar que tu la habías cargado, que era tu letra la que había escrito esas líneas que decían mi nombre en ella, que tu mano guiaba ese lápiz y cuando lo abrí no encontré nada nuevo, pero el solo verlo me trajo el recuerdo, más vivo que nunca, lo abracé, cerré los ojos, las lágrimas volvieron a brotar, incesantes como un tiempo atrás, busqué tu aroma y visualicé como lo acomodaste en la caja, como tus manos lo habían tocado para sacarle del sillón donde estaba sentado cuando cambió la estación de tu casa, como estaba sentado cada noche en ese sillón para verte dormir, acomodarte en las sábanas, cambiar de posición y volver a despertar cada día, ahora me acompañaría a mi para dormirse abrazado a mi, que tomaría mi aroma y que si queda algo de ti, eso se mezclará conmigo una vez más, no como quisiera, pero se mezclará finalmente. He abrazado a este ser sin vida desde que llegó y me trae el primer recuerdo de él, hasta el día que partí de regreso.
Soy una idiota por amarte y no poder sacarte de mis recuerdos y a veces quisiera un nuevo amor, que me quite el sueño, la respiración y un poco la vida que tú me quitaste, pero entro en razón y creo que sería peor aún, entonces quisiera que el anhelado olvido llegara pronto, porque a en instantes siento que esto no pasará y es que fue tan diferente todo contigo, que es por eso que estoy "marcada" ahora y a ratos siento que estoy tocando fondo tanto imaginar, sentir y esperar cosas o algo que se que no pasará.
Antes pensaba que la distancia entre los dos hacía fuerte nuestro amor, pero veo que de amor había bien poquito...
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