De pronto como una luz enceguecedora, me ha encandilado la noche, con el frío que cubre mi piel erizada, he despertado a las 3 de la mañana con una sonrisa dibujada en la cara, destapada, y con la luna en el cielo. Me incorporo de a poco a la cama y continuo pensando en ti, ya te tuve una vez entre mis brazos, por qué no volver a tenerte entonces? eso lo dejo al destino y a Dios que es un sabio guerrero.
Sencillamente me he vuelto incrédula, no creo ya en palabras lindas, ni en hombres que dicen "te quiero" sin realmente sentirlo, me siento acompañada de mi misma y no veo la necesidad por ahora de tener a alguien físico y es extraño porque mi subconsciente me traiciona soñando aun a altas horas de la noches con él. Es rarísimo sentir su piel, su aroma, ver su mirada de niño-hombre, observar su boca y volverla a probar sintiendo su lengua jugando con la mía y de paso el corazón se vuelve máquina sin control, salta y salta, y de tanto salto despierto yo, con su viva imagen en mis pupilas.
Hoy he recibido una noticia que me deja perpleja, en Diciembre tengo la oportunidad de volver a viajar, tendré suficiente dinero para costear los pasajes a donde se me pegue la real gana, pero estoy dudosa, pues no se si ahorrar o darme otra vuelta por Europa, eso si, esta vez sin intenciones de regresar a Chile, recorrer y vivir lo que más pueda en algún lugar del mundo, no se qué decisión tomar, aun queda mucho tiempo, pero no mucho para comprar los boletos, tengo una oferta laboral en Italia, pero ha regresado la Pily indecisa que no sabe qué hacer. No tengo nada que perder, más solo ganar con esta chance, pero no quiero repetir ni cometer más errores, creo que tendré que consultar a un libro de Coelho, sin duda si lo hago tendré la respuesta acertada, pero la pregunta es:
¿cuál?
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